Fiesta en casa de Ashley Cap. 7

- ¿Ashley? - dijo Will sonrojado.

- Si, es que, no os encontraba por ninguna parte, y esta mañana os vi salir de casa, supuse que iríais al río, y enefecto, estáis aquí - dijo con una sonrisa realmente falsa mirándome.

- Bueno que quieres - dije bruscamente

- Nada invitaros a la fiesta de esta noche en mi casa, tener, venid elegantes, eh?

Y dejó dos invitaciones encima del césped.

- ¿Bueno nos vamos?

- Claro ... - dijo Will con cara de frustrado.

Llegué a casa y James me dijo que Cat había llamado. Tenía ganas de llamarla y contarle todo lo que había pasado y para mi sorpresa después de llamarla, Cat también estaba invitada. Clarie que escuchó que tenia una fiesta, vino corriendo hacía mi diciéndome que teníamos que ir de compras. Clarie ama la moda, no como yo, pero tenía razón en la parte de que no tenía nada que ponerme. Así que nos fuimos de compras Cat, Cllarie y yo.

- ¿Que tal este vestido? - dijo Clarie

- Horroroso - le contesté.

- ¿Y este?

- Eso ya es otra cosa - me dijo Cat.

Era un vestido negro corto por encima de las rodillas con la espalda abierta y un escote de pico, precioso.

- Supongo que no esta mal - dije riéndome.

Y me lo probé. La verdad es que me quedaba de miedo.

- Wooooooooooooooooow - dijo Cat.

- Nena estás preciosa - dijo Clarie.

Yo solo supe sonrojarme.

- ¿Y los zapatos? - dijo Clarie.

- No hace falta enserio - le contesté

- Claro que sí - dijo ella, y me arrastró hasta la primera tienda de zapatos que vimos.

- No quiero llevar tacón - le dije. No se andar.

- Esta bien.

Al final terminé comprándome unas sandalias negras a conjunto. Y por fin llegamos a casa. Cat y yo decidimos vestirnos y ayudarnos mutuamente. Cat llevaba un vestido de tonos verdes, rosas y azules vaporoso precioso, y unos zapatos de tacón negros. Llevaba un maquillaje suave. Y la verdad es que iba, guapísima. Yo llevaba los dos mechones de pelo de delante recogidos en una pincita por detrás, Cat lo llamaba semirecogido. Me maquilló Cat, ya que yo nunca llevaba maquillaje y no sabía pintarme. Y bajamos las escaleras. Clarie, James y Elliot esperaban impacientes vernos. Y bajé la primera.

- Ya eres una mujer - dijo James.

- Wow, increíble hermanita - dijo Elliot.

- Estupenda, divina, preciosa - dijo Clarie.

Y con esos maravillosos piropos, Cat y yo cruzamos la calle para entar en casa de Ashley. Entramos y aquello estaba lleno de gente, no reconocía a nadie y de pronto vi a Ashley a lo lejos que me miraba y se reía.

- Cat, no deberíamos haber venido ...

- ¿Pero que dices Carrie? - y vi como se alejaba hacía un grupo de chicos.

Yo simplemente me quede sentada en las escaleras esperar ver a alguien conocido cuando de pronto una mano en mi hombro me asustó. Era Will.

- Madre mía Carrie, ¿eres tú?

- ¿Eres tonto? Jajajaja

- Estás preciosa - dijo mirándome fijamente a los ojos. Y me tendió la mano para que me levantara y echarme un buen vistazo.

- ¿Ves? Preciosa.

- No digas tonterías, Jajajaja

Entonces apareció Ashley y cogió a Will diciendole:

- Ven y te presentaré a unos amigos Will.

- Carrie, luego te veo, no te vayas - dijo mientras Ashley lo estiraba hacia ella.

- Claro ... - dije susurrando.

Y otra vez estaba sola. Solo miraba a Will. Ver que no se separaba de Ashley me torturaba. Esperé dos horas pero ya no lo soportava más. Cat me había dejado de lado y Will también. Así que decidí irme a casa. Entré a casa y nadie me esperaba despierto. Subí las escaleras y entré en mi habitación. Seguir llevando el vestido me parecía inútil, así que me lo quité y me puse mi pijama corto porque hacia mucha calor. Asomé la cabeza or la ventana y vi como la fiesta de Ashley continuaba y me acosté. Al poco rato oí un chasquido contra mi ventana, corrí la cortina y me asomé. Era Will. Bajé silenciosamente por la escaleras y salí al porche donde ya me esperaba Will.

- Will, que haces aqui

- Porque te has ido de la fiesta - dijo con tono molesto.

- Porque estaba sola, Cat estaba con un grupo de chicos y tú ... con Ashley - dije con tono enfadado.

- ¿No estarías celosa no? - dijo con una sonrisa picarona.

- Claro que no ... Bueno, ¿ que quieres?

- Terminar lo de esta mañana. - dijo serio y mirándome a los ojos fijamente.

Yo sabía perfectamente a lo que se refería y simplemente me deje llevar. Sus manos recorrieron mi espalda hasta llegar a mis caderas. Eran suaves, delicadas y se movían con elegancia. Subió la mano derecha por la espalda hasta llegar a la nuca y empezó a acercarme hacía el lentamente. Cada vez notaba su aliento mas cerca de mi cara. Cerré los ojos, y me dejé llevar. Posé mis brazos encima de sus hombros y entonces sus labios se posaron sobre lo míos con una delicadeza increíble. Los labios suaves y cálidos de Will se movían lentamente sobre los míos, dejando sobre estos, un sabor afrodisíaco que me mataba de placer.