Nada más llegar a el aeropuerto fuimos mi tía y yo decididas a pasar por el control de la policía en el aeropuerto. No tuvimos ningún problema. Pasamos dentro, estábamos a punto de embarcar, cuando una voz por el megáfono, dice: - El vuelo a París a sido cancelado. Yo con la cara hecha un cuadro me digo a mi misma: - No puede ser. Pero sí, lo cierto es que si podía ser. El vuelo de París, mi vuelo, había sido cancelado a causa de una huelga en el aeropuerto de París. Flipante, verdad? Llevaba esperando ese viaje unos cuantos meses. Luego de oír la exageradamente mala noticia nos dirigimos a la cola de reclamaciones donde la compañía de vuelo intentaba ayudar a los 500 pasajeros mas o menos que nos habíamos quedado en tierra. Después de 3 largas horas de espera, por fin llegamos al mostrador, pero nada más que un tio palurdo nos atendió. Ahora tenemos vuelo para el día 7 de Julio. Pero no sabéis lo que es tener la puerta de embarque delante de tus narices a 5 minutos de embarcar en el avión y te dicen que tu vuelo, ese que llevas esperando meses y que ansias con locura, ha sido cancelado.
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